¿Por
qué ya no me miras? ¿Es que ya no me quieres? Es eso, ¿verdad? Ya no me
quieres... Entonces he de irme de aquí. Dejar de hacerte la cama y de
acariciarte el pelo por las mañanas. ¿Por qué ya no me miras? ¿Es qué ya no te
gusto? Es eso, ¿verdad? Ya no te gusto... Podrías haberme avisado antes y me
hubiera comprado un abrigo más grueso para el invierno y unas bufandas nuevas y
unos guantes altos... Sí, sé que de dinero nunca fuimos bien pero entiéndelo
que, el invierno que se aproxima será más frío si no tienes a quién abrazar.
¿Por qué ya no me miras? Bueno, no pasa nada. No tienes porque preocuparte,
poco a poco me haré a la idea de no tenerte en Navidad. ¿Sabes? Recuerdo
cómo fueron las últimas. Yo con mi gorro de lana verde y tú con el jersey azul
que tanto odias y que yo te hacía poner porque era suave y olía tan bien... Y
aquella tarde que llovía tanto. Y aparecí corriendo en la estación, buscándote.
Y tú me esperabas temblando, muerto de frío. Con las mejillas sonrosadas y la
punta de la nariz helada. Y al llegar a casa encendiste la chimeneas y,
mientras las llamas bailaban y todo ardía, tus labios aun mantenían ese color
rojizo que diciembre te había pintado... ¿Por qué ya no me escuchas? ¿Es qué ya
no te importo? Es eso, ¿verdad? Ya no te importo... Pues podrías haberme dado
una señal y no llegar a esto, así, sin más. Pero no te culpo... Es difícil
querer a alguien como yo. Tan insegura, tan desastre y tan mal cocinera. Pero
te prometo que lo he intentado. Y lo sabes... ¡Joder! ¡Joder! Yo lo he dado
todo... ¿Por qué ya no me hablas? ¿Es qué ya no soy nada? Es eso, ¿verdad? Ya
no soy nada para ti. Entonces puedes tragarte tus palabras. Trágate tus
gilipolleces, tus tonterías, tus promesas... todas esas mierdas. Ahora quiero
que me mires. Mírame y que te duela. Sé que te duele. Mírame, quiero
darte pena. Mírame mientras lloro, mientras me arrastro y me lamento. Que
idiota... ¿Por qué ya no me miras? ¿Es qué ya no me quieres? Es eso ¿verdad? Ya
no me quieres... Entonces he de irme de aquí.
MONÒLEG
TEATRAL: Rosella Espinós Cardona
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